6 ago 2013

Quinua: El producto peruano en el mundo

En el país de los incas, maestros en la domesticación de plantas y animales, protectores del pueblo peruano al que amaban y protegían, se produce un delincuencial y expropiatorio encarecimiento de la quinua, atentado que es obra de políticos corruptos y hambreadores y de empresarios corruptos y saqueadores.

Con grave irresponsabilidad, algunos personajes de la política y el empresariado y otros mercachifles corruptos y arribistas han estado pregonando a los cuatro vientos que la quinua es el alimento más completo, que es una solución para el problema de la desnutrición, etc., y que el Perú contribuirá a luchar contra el hambre mediante la exportación de la quinua; ¡no les interesa la extendida desnutrición infantil que reina en el Perú!

Que la quinua es un alimento completo y puede ayudar a combatir la desnutrición es cierto, siempre y cuando se actúe de manera seria y teniendo en cuenta los intereses de la mayoría del país. Es triste decirlo, no ha ocurrido en el Perú, donde la política oficial del estado es destruir a la población agrediéndola con un sistema de salud de una calidad propia del África subsahariana y con el propósito deliberado de causar desnutrición y tuberculosis, de modo que con orgullo los publicistas del exhiben el segundo lugar que tiene el Perú en el mundo en casos de tuberculosis multidrogoerresistente, lo cual asegura a los inversionistas  que la morbilidad y mortalidad de los peruanos garantiza una rotación y movilidad de personal que acepta salarios bajos simplemente para no morir de hambre.

Esto ocurre porque en la planificación estatal se ha excluido la seguridad alimentaria, que si se hace entraría en contradicción con el propósito de políticos corruptos y de empresarios corruptos de diezmar y degradar la calidad de vida de millones de peruanos que son pobres e indigentes. Al existir -sí, existe- una política de seguridad alimentaria destinada a fomentar el hambre y la enfermedad, se ha llegado a la monstruosa campaña de promover la exportación de la quinua quitándola del alcance de millones de pobres que apenas pueden soñar con el consumo de la quinua, que en Lima y otras ciudades ya ha llegado al inalcanzable precio de 13 nuevos soles el kilogramo que excluye del consumo de la quinua a la gente de bajos recursos.

Teniendo entendido que la producción de quinua no beneficia a las masas de pobres e indigentes del Perú y que el agricultor gana una miseria con su trabajo, en promedio cinco veces menos que el intermediario, es alentadora la confirmación de la noticia de que en el extranjero, en lejanos países, se está cultivando la quinua.
La diferencia en productividad muestra claramente que los políticos y empresarios peruanos nunca han tenido genuino interés por la quinua mientras servía de alimento a una pequeña parte de la población; en ningún momento tuvieron en mente mejorar la producción de la quinua ni promovieron investigaciones serias y en profundidad para que todos los peruanos podamos consumirla. Solo cuando en el primer mundo se interesan por la quinua empiezan los corruptos a exigir de los campesinos más y más quinua, que se cultiva acá sin técnica moderna.

Por eso el Perú no va a poder competir en la exportación de este grano con países que trabajan en serio invirtiendo mucho dinero en investigación y experimentación, algo que no quieren hacer los políticos peruanos si ven que eso va a beneficiar a los pobres, a la indiada. Además, debemos señalar que los cuatro países mencionados (India, Dinamarca, Estados Unidos y Canadá) son industrializados y pueden crear maquinaria que se adapta al resultado de las investigaciones y experimentos que se realizan en el terreno. El Perú no fabrica esas maquinarias ni está asociado a un país que pueda hacer la maquinaria que necesitamos según las características de nuestra geografía y de los terrenos de cultivo de las diferentes zonas.

Meses atrás, hemos publicado un artículo en el que exhortábamos a nuestros lectores de habla inglesa a evitar que en sus países la importación de quinua agrave el problema del hambre y la miseria que reinan en el Perú, para lo cual debían propagar la idea de que lo mejor era que ellos mismos cultiven la quinua, objetivo que se está logrando cuando nos enteramos de la exitosa experiencia que empieza a desarrollarse en esos países.

Su cultivo extendido en esos y otros lugares lejanos es positivo por dos razones: Primero, habrá más de nuestra quinua disponible para el pueblo peruano, al disminuir o cesar su importación en esos países que ya la cultivan. Segundo, se reajustarán las formas de distribución y precios, con una posible disminución del parasitismo de los intermediarios.

A los campesinos no les irá muy mal, considerando que todo el tiempo ellos son la parte más débil de la cadena de producción y comercialización, porque mientras el agricultor arriesga su inversión de dinero y trabajo, los intermediarios ganan un promedio de cinco veces más que el campesino sin arriesgar prácticamente nada. Si los intermediarios u otros ladrones continúan especulando con los precios de la quinua, la importación pondrá las cosas en su sitio, cuando más barato resulte comprar la quinua importada que la quinua local.

La tarea pendiente y que no se va a emprender es desarrollar una política de seguridad alimentaria, porque los políticos corruptos y empresarios corruptos que gobiernan el Perú para beneficiar a Chile solo quieren saquear nuestra patria y obtener ganancias utilizando al pueblo peruano como una materia prima desechable y despreciable, que no merece ni una buena alimentación ni un buen servicio de salud.

Entonces, continuará este despojo de la quinua hasta que las llamadas “fuerzas del mercado” y la presión social y política impongan como solución la compra de quinua traída del extranjero, cultivada con las más modernas tecnologías.

Como cosa especial quedará para el Perú y Bolivia la producción y venta de variedades endémicas de quinua, tan especiales que solo se pueden cultivar en determinados lugares; tanto es así, que si se llevan las semillas a otra parte, no prosperan o crecen mal, o dan granos de baja calidad. Además, para conocimiento de aquellos que creen que la quinua solo puede cultivarse y prosperar en el Perú o en el Hemisferio Sur, debemos señalar que los indios de América del Norte conocieron y cultivaron por lo menos dos variedades de plantas similares a la quinua: Chenopodium berlandieri y Chenopodium album. No hay que hacerse ilusiones ni contar cuentos corruptos.


Fuente: www.connuestroperú.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario