Edgar Altamirano Márquez (*)
San Borja se ha convertido en un distrito modelo y hay que reconocer que ello es producto de las últimas gestiones ediles que han logrado definir el curso hacia dónde va la comuna al margen de la tienda política a la que pueda pertenecer el alcalde de turno.
En tal sentido, los sanborjinos estamos en la obligación de contribuir a la gestión municipal, continuar con lo bueno y mejorar las deficiencias y carencias que aún existen. Este artículo se centra, principalmente, en tres ejes temáticos que procedemos a analizar.
Seguridad ciudadana
Desde hace más de una década la seguridad ciudadana forma parte del debate sobre la lucha contra la violencia y la delincuencia en América Latina. En nuestro país, la inseguridad ciudadana se ha incrementado generando un clima de desconfianza, desesperanza y desánimo, y a su vez, encarece el costo de vida, pues implica la contratación de infraestructura de seguridad (rejas, cerraduras, etc.), contratación de servicio de vigilancia, entre otras medidas.
La inseguridad ciudadana no sólo es un problema que aqueja a San Borja. Actualmente, “Lima vive una ola delincuencial”, caracterizada por la violencia, la delincuencia, que genera asaltos, robos, secuestros, abuso sexual, entre otros que van en aumento.
Sin embargo, hay que destacar que hace menos de un mes nuestro distrito ha sido reconocido, entre 35 distritos de la capital, como uno de los más seguros en base a cuatro indicadores: victimización por hogares, evaluación favorable de los serenazgos, evaluación favorable de la policía y percepción de inseguridad, cuya fuente es la Segunda Encuesta Metropolitana de Victimización 2012 realizada por Ciudad Nuestra.
San Borja cuenta con un sistema de video vigilancia que comprende, entre otros aspectos, la instalación de videocámaras en lugares estratégicos que permite una mayor eficiencia y mejor capacidad de reacción del serenazgo. También, un oportuno nivel de coordinación con las juntas vecinales de los diferentes sectores que conforman el distrito.
Todo lo cual, conlleva a pensar que existe un plan integral de seguridad que implica una adecuada ejecución de los recursos. No obstante, es necesario advertir que todavía existen zonas que requieren de seguridad ya que los malhechores reinciden en cometer sus fechorías en la urbanización Javier Prado, por ejemplo.
San Borja es un distrito próspero y con una gran demanda de infraestructura inmobiliaria, áreas verdes, negocios y centros comerciales. Prosperidad que lo ha convertido en un lugar atractivo para la delincuencia.
Congestión vehicular
Una de las causas de la congestión vehicular en San Borja, radica en su ubicación del distrito que permite conectar con otros como: Surco, Miraflores, Surquillo, San Isidro y, a la vez, sirve de paso a Chorrillos, Barranco y La Victoria. En consecuencia, es utilizado por miles de personas para cruzar la ciudad.
Siendo ello así, es fácil identificar los focos de tránsito ya que las arterias principales son las avenidas Javier Prado, Aviación y San Luis. Esta última presenta mayor tráfico en horas punta generando malestar a los vecinos, sumado al reducido espacio de estacionamiento. Sus calles han resultado reducidas debido al crecimiento de su población.
La gestión edil requiere plantear medidas y acciones de solución al problema a fin de prevenir que las arterias en casos de emergencia no se vean obstaculizados por vehículos estacionados en plena vía pública.
Recientemente, la municipalidad lanzó el primer programa de transporte público no motorizado en Lima, denominado “San Borja en Bici” que busca poner a disposición de la comunidad un sistema de transporte público, ecológico y eficiente, con estaciones para bicicletas, de uso gratuito para los vecinos. Dicho programa busca complementar los sistemas de transporte masivo como el Tren Eléctrico y El Metropolitano.
Urbanización y medio ambiente
La decisión de continuar con el mejoramiento de las áreas verdes y con los trabajos paisajísticos conjuntamente con el rediseño de los parques, a través del sistema de riego tecnificado que ha realizado la actual administración, hace de San Borja un distrito ecológico en el que los vecinos disfrutan de espacios y ambientes salubres.
Propuestas
Al igual como existe un servicio de auxilio mecánico con grúa incorporada para atender las eventualidades de los residentes, debería el municipio adquirir una o dos ambulancias a fin de atender situaciones de emergencia, a su vez capacitar un grupo de serenazgo para cubrir las emergencias que se presenten.
Es necesario trabajar en el acceso a la salud y, en tal sentido, recomendamos la construcción de dos centros médicos ubicados en la zona norte y sur del distrito, cuyos precios estén al alcance de los vecinos, así como velar por la salud de la niñez, para lo cual debe evaluarse la creación de un seguro médico para niños y adolescentes.
Es importante propiciar el diálogo con los vecinos a fin de conocer sus inquietudes, preocupaciones, sugerencias, etc. y saber cuáles consideran como los problemas más álgidos. Este sería un instrumento efectivo para la mejora de la gestión edil.
Evaluar que beneficios adicionales podría recibir el habitante sanborjino por el pago puntual de sus tributos y, eventualmente, una reducción en 10 por ciento de los arbitrios. Es necesario que los contribuyentes sientan que sus impuestos y tributos se orientan a su beneficio y del distrito donde viven.
A manera de reflexión considero que los lugareños debemos contribuir cada día a mejorar nuestro distrito, involucrarnos con nuestra comunidad para la tranquilidad de nuestras familias. Ello implica ser más participativos y por ende, señor alcalde, le solicitamos ser comunicativo con los vecinos a través de sus representantes.
(*) Abogado, egresado de la maestría de Gobernabilidad del Instituto de Gobierno de la Universidad San Martín de Porres y ex tercer miembro del Consejo Nacional Penitenciario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario