Mario
Barturén Dueñas (*)
En
esta ocasión, dentro del marco de la modernización del Estado, analizamos el
tema relacionado con EsSalud. Un organismo público descentralizado que data del
año 1936 (76 años), cuando se promulgó la ley 8433, por la que se creó la Caja
Nacional del Seguro Social Obrero.
Durante
todo este tiempo a la fecha, se han variado los nombres institucionales y se
han sucedido diferentes directivos al vaivén de los gobiernos elegidos y/o de
los gobiernos impuestos directatorialmente, con las renovadas promesas de
modernización. Pero, la realidad nos hace despertar para reitéranos la
imposibilidad de que se logren los cambios, pues mientras el modelo de gestión
mantenga el modelo político del botín de las aportaciones como recursos del
Estado y dentro del mismo modelo, se apropien porcentualmente de un porcentaje
de las gratificaciones percibidas por los
trabajadores como si fueran salarios y la recaudación sea fiscal (Sunat)
-para engrosar los recursos del Estado (MEF)- no habrán los ansiados cambios
institucionales que nos alienten la esperanza de una verdadera institución
prestadora de un derecho fundamental como la salud.
Recordaremos
dentro de esta realidad el uso de los recursos financieros que el gobierno
utilizó para construir la autopista de Pucusana y el Centro Cívico. Esos
fondos, nunca fueron devueltos a los aportantes para que cumplan su real objetivo.
EsSalud,
desconocemos que tenga un sistema de costos,
para medir la eficiencia de sus atenciones de salud, tanto ambulatorias como de
clínica. Esta realidad, de ser cierto, agravaría el modelo de gestión, pues se
estaría ejecutando un modelo de administración ineficiente y despilfarrador o
deficitario. Lo que se recauda no se puede medir su utilización con los costos
correspondientes. Si a esta situación se le considera que por la ineficiencia
de la atención, obliga a los trabajadores asegurados a tener un seguro
particular adicional, donde se atienden, es más grave la realidad. Por tanto,
es muy urgente replantear el modelo de gestión de EsSalud.
Desde
mi punto de vista, existen algunas decisiones que, seguidamente, comparto y que
se deben tomar en cuenta:
a) Fondo
intangible de las aportaciones patronales EsSalud: las aportaciones patronales
no serán fondos de la Caja Fiscal del MEF, sino un fondo intangible para
financiar únicamente las atenciones de EsSalud.
b) EsSalud
debe organizar y establece un Sistema de Costos, que mida eficientemente los
costos por atenciones ambulatoria y de clínica, para costear sus tarificas
correspondientes y organizar una cuenta de costo para cada titular asegurado,
que incluya los costos de sus dependientes inscritos.
c) El
fondo intangible de las aportaciones patronales deberá ser administrado por el
MEF, con representante de EsSalud.
d) No se
aplicará aportaciones contra las gratificaciones y/o cualquier otro ingreso que
no sea aplicado a los sueldos o salarios descontados en planilla.
Incluso
se considerarán a los trabajadores del estado, que será requisito estar al día
en sus aportaciones patronales para la atención del titular y sus dependientes.
e) Organizar
EsSalud como empresa prestadora de la salud sólo de los asegurados titulares y de sus dependientes inscritos.
f) EsSalud,
organizada como empresa podrá concesionar total o parcialmente sus atenciones
médicas a favor de sus asegurados y dependientes y según sus tarifas podrá
autorizar reembolsos a favor de sus asegurados y dependientes por atenciones
ambulatorias, clínica y/o servicios médicos especializados.
(*) Militante
del Comité Distrital de San Borja del Partido Aprista Peruano, Contador Público
Colegiado, magister en Administración de Empresas, consultor y docente
universitario.
No hay comentarios:
Publicar un comentario