3 feb 2013

El 2013: Hacer y organizar


Herbert Mujica Rojas (*)

Pasadas ya las celebraciones de bienvenida al año novísimo, corresponde a los peruanos plantearse en tierra firme objetivos, construir ambiciones y edificar el pavimento de sus éxitos bajo el dintel de dos palabras claves: Hacer y organizar.


El reto consiste pues en declinar con firmeza la tendencia consuetudinaria al poema de palabras bien enhebradas, recurrencia de discursos demagógicos sin los cuales políticos, gobernantes, ministros o el 98 por ciento de los que conforman la cosa pública, serían más o menos ceros estridentes y lamentables. Perú debe enterrar lo que en términos simples se llama el jarabe de lengua.

Hemos leído con incredulidad que no pocos intonsos consideran que luego de las audiencias orales entre Perú y Chile en la Corte Internacional de Justicia de La Haya, sólo queda, para entrar en el paraíso maravilloso del abrazo definitivo con los del sur, el veredicto. ¡Nada más lejos de la verdad!

Hemos sostenido que Perú se debe su propia respuesta, una capaz de integrar a millones de connacionales de todas las razas, orígenes, credos y tendencias, en un haz potente iluminador de avenidas geopolíticas realistas y por los próximos 100 años.

Y es pertinente recordar que los clubes electorales, mal llamados partidos políticos, carecen de planes o perspectivas distintas que las de ocupar cargos públicos o legislativos. ¡Como si la democracia representativa fuera la piedra filosofal para los sempiternos y añosos problemas peruanos!

Hacer y organizar constituyen términos cardinales para cualquier nación. Y esta tarea de incorporar con el ejemplo de sus vidas al servicio de los demás, en la amplitud integral de disciplinas sociales, políticas, empresariales y de índole variopinta, corresponde a los líderes. No hay chance para una nación sin que los adalides sean limpios, integérrimos, hacedores y organizadores de su sed y ambición de victoria.

Incómoda la interrogante en torno a si esto es lo que ocurre en Perú. Sostengo que no es así. Casi el 100 por ciento de hojas de vida ostenta mácula que transitan por la deshonestidad, falta de escrúpulos, angurria desenfrenada, inmoralidad con los recursos públicos, desde el gobierno o cuando fueron parte de ellos y en circunstancias que Palacio se convirtió en festival de favoritismos y latrocinios mayúsculos.
Es hora de hacer y organizar

Hacer de la honradez signo y sino de vida. Para ser político, empresario, adalid o líder en la cosa pública o privada ¡no es imprescindible robar! Este axioma debiera enseñarse desde las mesas de casa hasta la universidad y centros de trabajo. ¿Quién no ha escuchado la sentencia que claman los cacos en Perú: la política es sucia? De ese modo, con manifiesto contrabando, se "legaliza" lo que es una aberración patética. Los delincuentes roban y reaccionan, los ciudadanos construyen y edifican.

Hay que organizar un Estado resistente ante cualquier eventualidad o casus belli que pudiera asomar sus contornos en los meses que siguen. Acatamiento no significa cumplir con lo que sentencie cualquier corte internacional. Una cosa es la voluntad y aspiración y otra, muy distinta, el comportamiento histórico de quienes han hecho mofa y burla a los tratados y contratos, una política de estado. Quien o quienes prediquen la paz del conformismo o la tumba del derrotismo son traidores.

A los empresarios toca una misión de suyo delicada: impulsar, haciendo y organizando, el engrandecimiento de sus éxitos y, por tanto, una mejor distribución de la riqueza lograda con sus trabajadores.

El pacto social requiere de modernización y la urgente mira que no vivimos tiempos placenteros y de solaz sino de lucha y combate. Quien invierte desea ganar, sí es cierto, pero también lo hará con más amplitud si agranda el radio de sus beneficios. Y todos contentos.

Los hombres y mujeres libres del Perú, los que no están vendidos a corporaciones cansinas y ortodoxas en sus metas hacia afuera, tienen este 2013 la oportunidad de prestar su concurso patriótico sin regateos ni majaderías.

Si la nación está como está es porque cenáculos microscópicos y mediocres han sido dejados a su libre albedrío y hambruna de recursos adquiridos de mala fe. Es inaudito quejarse de la situación si no se hace nada porque ésta cambie y de modo radical.

En cuanto a quienes creemos en un Perú libre, justo y culto, la promesa renovada de transitar por caminos de victoria. En efecto y sin duda alguna podemos repetir: 2013, hacer y organizar.

(*) Con estudios en Antropología. Ha sido asesor del Ministerio de Relaciones Exteriores. Editor en Perú de la Red Voltaire, colaborador y columnista de diversos medios nacionales, escritor y estudioso de la realidad peruana.

En este local no se aceptan “cholos”


Wilfredo Pérez Ruiz (*)

Hace más de un año trate el tema de la segregación racial coincidiendo con los reprochables sucesos acontecidos en los multicines UVK de Larcomar que mostraban una realidad que, aunque pretendemos ignorar o dar por superada, está presente en la sociedad: la discriminación.

Un reciente y minucioso estudio -elaborado por el Consorcio de Investigación Económica y Social” (CIES) y la Universidad del Pacífico- titulado “La belleza es el principal factor de la discriminación laboral en el Perú”, examina este fenómeno y revela cifras bastante alarmantes acerca de su vigencia.

Dicha publicación señala que la apariencia física influye un 83 por ciento en la decisión de tomar a un empleado. Incluso, las personas consideradas más atractivas pueden obtener una remuneración hasta 17 por ciento mayor respecto de aquellas que no son bellas. Igualmente, demostró la existencia de un 55 por ciento de marginación por el aspecto racial y 34 por ciento por género. Estos resultados se aplican para candidatos a puestos de atención al cliente y oficina. Aunque usted no lo crea, una mujer de apellido Mamani puede tener menos posibilidades de ser contratada.

También, precisa que las brechas son mayores en trabajos profesionales que en los técnicos o no calificados. Esto puede relacionarse con la escasez de mano de obra en estas categorías. Otra de las conclusiones es que mientras más caucásico (blanco o de origen europeo) se vea alguien, tendrá más oportunidades de conseguir trabajo, sin importar su creatividad o eficiencia.

De otro lado, el Parlamento Andino propuso al Ministerio de Trabajo que no sea requisito la colocación de la foto en el currículum del postulante. “Esto se ha ensayado en países europeos con buenos resultados antes de las entrevistas personales. Podría ayudar a reducir la discriminación, pero no creo que sea suficiente. El Ministerio de Trabajo debe hacer un monitoreo en las empresas para orientar los criterios válidos para la contratación”, ha declarado Martín Carrillo, especialista de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

A continuación deseo recordar algunos sucesos que muestran la terrible vigencia de la discriminación. Hace unos años un grupo de artistas realizaron una singular marcha de protesta titulada "Empleada audaz", en las playas de Asia, contra la marginación y el racismo hacia las trabajadoras del hogar en esa zona. El Country Club Villa de Chosica tiene un baño asignado a las empleadas domésticas con una indicación muy precisa: “SS.HH. de Amas”. Hasta diversos edificios de Lima poseen ascensores “solo para personal de servicio”.

El Real Club de San Isidro, como lo acaba de mostrar un programa de televisión, prohíbe entrar a ciertas instalaciones a las empleadas que acompañan a los hijos de sus socios. Por su parte, en el mesocrático balneario de Ancón la playa y el malecón son cerrados –determinadas horas al día los fines de semana- para uso exclusivo de sus residentes, negando el acceso al público proveniente de otros lugares. Todo ello se realiza con la sórdida complacencia de la policía y las autoridades municipales.

Esto me trae a la memoria lo observado durante mi permanencia en el Patronato del Parque de Las Leyendas (2006 – 2007), cuando comprobé  la conducta segregacionista y descortés de los funcionarios públicos frívolos, pusilánimes e insensibles que miraban con desdén a los más modestos trabajadores quienes demostraron una entrega, compromiso y lealtad inexistente en los mal denominados “servidores estatales”. Los directores y jefes de oficinas jamás almorzaron en el comedor de los obreros, ni se propusieron forjar un vínculo de acercamiento. Era “incompatible” con su estatus.
Del mismo modo, la publicidad contiene mensajes excluyentes. Vemos en encartes y avisos comerciales prototipos arios, de pelo castaño y con apariencias que no representan las características de nuestro mestizaje. Conozco instituciones que en sus medios publicitarios están exceptuados esos amplios sectores de clase media baja a los que también están orientados sus servicios. La imagen del blanco es la prevaleciente.

Me parece hipócrita rechazar la discriminación solo en ocasiones coyunturales. Tengamos en cuenta la que padecen las personas con alguna discapacidad como si fueran “incapaces” para desempeñarse laboralmente. Está demostrado que un individuo sordo cumple con celeridad ciertas tareas en una fábrica con alta emisión de ruido y, además, no se distrae, ni conversa y su productividad es una de los mejores. Podría poner un sinfín de casos que acreditan que ser discapacitado no imposibilita el desarrollo profesional. Lástima que muchos empresarios no lo crean así.

La discriminación –en todas sus formas- es una muestra de intolerancia y falta de amplitud para convivir y, por lo tanto, aceptar nuestra pluralidad étnica, cultural y social. Debiéramos reflexionar sobre su ascendencia y como contribuye a agudizar las grietas que impiden aprender a forjar mínimos vínculos de coexistencia. Actúa como “efecto cascada” en la medida en que va acentuándose conforme desciende. Aunque ésta se genera, del mismo modo, de abajo hacia arriba en nuestra patria. El que permite prácticas discriminatorias -con su anuencia y silencio- contribuye a que esta severa lacra se siga promoviendo en el Perú del siglo XXI.

En un país visiblemente convulsionado, invertebrado y fragmentado, el desprecio al semejante gesta las condiciones para incrementar un clima de violencia, resentimiento,  rechazo y dolor. Es una manifestación soterrada de barbarie y humillación a la dignidad humana. Es negar nuestra identidad y, por cierto, una prueba de involución y tercermundismo moral.

(*) Docente, consultor en organización de eventos, protocolo, imagen profesional y etiqueta social. http://wperezruiz.blogspot.com/

Consideraría Palestina querellar a Israel




Palestina emplearía la prerrogativa que ahora tiene como estado observador ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para querellar a Israel ante la Corte Penal Internacional (CPI), en caso de que ese país insista en edificar asentamientos en Jerusalén oriental.

"Si Israel quiere llevar a cabo la implementación del plan E1 y de otros planes relacionados con los suburbios de Jerusalén, entonces sí iríamos ante la Corte Penal Internacional", indicó hoy Riad Malki, ministro de Relaciones Exteriores de Palestina.

Tras una reunión en el Consejo de Seguridad de la ONU, el diplomático manifestó que el gobierno de la Autoridad Palestina considera que construir en la llamada zona E1, en el este de Jerusalén, constituye cruzar una "línea roja" que tendría consecuencias.

La CPI, que se encarga de investigar genocidios, crímenes contra la humanidad y de guerra, podría determinar posibles violaciones cometidas por Israel en los territorios palestinos, y emitir sanciones internacionales de carácter legalmente vinculante.

Palestina, en su calidad de nuevo estado observador de la ONU, como la asamblea general aprobó en noviembre pasado, tiene el derecho de solicitar ingresar a la CPI, aunque aún no lo ha hecho.

Malki explicó que no han solicitado ser miembros de la CPI como un gesto para que Israel regrese a la mesa de negociaciones bilaterales, suspendidas en setiembre de 2010.

Tras la reelección el martes del primer ministro Benjamín Netanyahu, apoyado ahora por una nueva coalición política, Malki indicó estar a la expectativa de lo que haga el gobierno de Israel en su nuevo mandato.

Por su parte, Robert Serry, coordinador especial de la ONU para el Proceso de Paz en el Medio Oriente, dijo que las elecciones en Israel y Jordania, así como el segundo mandato de la administración estadunidense, podrían ejercer influencia sobre el proceso de paz.

"Estamos entrando en un periodo crítico, en el que las acciones concertadas son vitales si es que queremos salvar la solución de dos estados", manifestó Serry. Advirtió, sin embargo, que la construcción de nuevos asentamientos considerados ilegales bajo el derecho internacional, alejaba la posibilidad de la solución de dos estados.

Fuente: Agencia Notimex

Morir en Uchuraccay


Raúl Wiener Fresco (*)

Muy sentida y diría que honesta nota de Gustavo Gorriti en el último Caretas. Con todos los recuerdos a flor de piel y los archivos a la mano el periodista recuerda el viaje que la revista hizo en un helicóptero hacia la zona de Huaychao, en las altura de Iquicha en Huanta, el día 27 de enero de 1983, siguiendo, sin saber, la ruta que por tierra habían recorrido el día anterior los periodistas que también querían llegar a la misma comunidad de donde habían venido las noticias de la ejecución de siete senderistas por los comuneros que les habían declarado la guerra y que en el camino resultaron muertos en la zona de Uchuraccay.

Es verdad que en medio de las pasiones desatadas se dijo que la preferencia del general Clemente Noel por la revista obligó al peligroso recorrido terrestre, pero lo más probable es que Mendívil, de la Piniella, Gavilán y los otros decidieran ir por su cuenta, sin soporte militar, porque lo que tenían era precisamente una clara desconfianza en la versión de los militares que el gobierno había asumido como propia el domingo anterior. En solo tres semanas del ingreso de los militares a la guerra ayacuchana, las comunidades decidían eliminar a los subversivos que circulaban por sus territorios, lo que significaba que en muy poco tiempo Sendero Luminoso sería erradicado.

Caretas, por cierto, tendía a asumir la visión del gobierno, con el que simpatizaba. La prensa que discutía las implicancias de la militarización del conflicto buscaba asegurar su independencia respecto al nuevo Comando Político Militar de la Zona de Emergencia. En Uchuraccay comienza en realidad una etapa de difíciles relaciones entre el periodismo y los militares que tuvo varias víctimas notables en Ayacucho y otras partes del país. Por eso la teoría de la confusión siempre tuvo serios límites y se convirtió casi en encubridora dentro del informe de la Comisión Vargas Llosa.

Las fotos que Willy Retto tomó antes de morir y que son emblemas del coraje periodístico, mostraron un diálogo previo entre comuneros y hombres de prensa que se rompe y se convierte en violencia. A los ocho periodistas los matan cuando no eran ningún peligro para sus atacantes, que los tenían dominados. Al guía y a un comunero que se opuso a la matanza, los eliminan después, con total conciencia de lo que estaban haciendo. Ahí la pregunta es si esta acción brutal era propia de una confusión, de un estado alterado o de una decisión precisa.

Y es en este punto en que se entra al rol de los militares: ¿Sabían que los periodistas estaban caminando hacia la muerte?, ¿Estaban cerca de los hechos de violencia como para influir en ellos?, ¿Administraron el proceso para hacer saber la noticia? Lo cierto en todo esto es que la sangre de Uchuraccay acabó con las pretensiones de una prensa actuando con libertad y revelando la verdad de lo que estaba pasando. Para algunos medios esto fue un cómodo pase a voceros de la versión oficial. Para otros el desafío se agrandó y se situó entre la vida y la muerte

(*) Periodista, escritor, consultor independiente, analista político y económico. Editor de investigaciones del diario La Primera. Autor del libro “Fe de ratas” (2011).

Relativismo moral o decadencia moral


Carlos Penalillo Pimentel (*)

Los sinvergüenzas pueden estar de plácemes ya que con las nuevas corrientes pueden encajar tranquilamente con la fina denominación de “relativistas morales”.

A diario observamos situaciones cuestionables en nuestro entorno, en las calles y en la vida pública y política con mayor frecuencia. La corrupción y la falta de respeto resultan el pan de cada día en nuestro querido Perú donde los conceptos de Ética y Moral cada vez son las lejanos a la realidad, siendo los procedimientos éticamente incorrectos los predominantes y en muchos casos los que caen en esto finalmente se constituyen en víctimas y resultan siendo personajes maltratados dignos de ser consolados.

Pero esto no es novedoso en la realidad peruana. Manuel González Prada -a inicios del siglo XX- nos llenó de ejemplos a través de su gran prosa sarcástica de vivencias tan similares a las que tenemos ahora. El librepensador anarquista dejó plasmado las denuncias en sus afamadas obras como “Páginas libres”, “Horas de lucha”, “Anarquía”, “Discurso en el Politeama”,  entre otros.

Hay una corriente que gana popularidad últimamente y se hace fuerte en sociedades europeas que propugnan que la moralidad no está basada en ninguna norma absoluta y que el comportamiento ético depende de la coyuntura y cultura social. A esto le denominan “relativismo moral”.

Vivimos un momento donde los amantes del comportamiento moral y éticamente incorrecto encuentran su tabla de salvación en esta teoría y acusan a los absolutistas ortodoxos como “intolerantes”, como si el mal de cualquier índole o grado debe ser tolerado. Todas las noches vemos las noticias de abusos, violaciones, crímenes, negligencias, robos, corrupción, tráfico de influencias, etc., etc. Debemos entonces entender que todos estos casos serían producto de la coyuntura o cultura social.

El máximo representante de la Iglesia Católica, el Papa Benedicto XVI denunció a inicios de diciembre la lógica del “relativismo moral” que niega la ley moral natural y la dignidad del hombre, además de remarcar que los principios éticos “no son negociables”. En otras entrevistas indicó que el relativismo moral, en vez de trazar el horizonte hacia una sociedad libre, justa y compasiva; tiende a producir frustración, desesperanza, egoísmo y desprecio por la vida y la libertad de los demás.

Gracias a Dios aún los que tenemos sentido común e intentamos vivir con principios éticos y moralmente correctos somos la inmensa mayoría. No se trata de fomentar la cacería de brujas, ni caer en poses cucufatas trasnochadas, debemos hacer causa común y predicar con el buen ejemplo en todos los aspectos vivenciales, además de elevar nuestras voces de protesta cuando veamos situaciones corregibles para enderezar el camino.

Bien dijo el recordado maestro González Prada: “Rompamos el pacto infame y tácito de hablar a media voz. Dejemos la encrucijada por el camino real, y la ambigüedad por la palabra precisa. Al atacar el error y acometer contra sus secuaces, no propinemos cintarazos con espada metida en la funda: arrojemos estocadas a fondo, con hoja libre, limpia, centellando al sol.”

  (*) Licenciado Tecnólogo Médico en Laboratorio Clínico y Anatomía Patológica, militante del    Comité Distrital de San Borja y ex dirigente estudiantil de la JAP.

Oración por el Perú


Gastón Acurio Jaramillo (*)

Nos complace compartir las palabras del prestigioso chef Gastón Acurio en las que
reflexiona acerca del Perú, de sus grandezas nacionales y ofrece una mirada esperanzadora
en un medio en donde no debiera haber espacio para la resignación, la apatía, el conformismo y la indiferencia colectiva que tanto lacera a los peruanos.

Señor, estamos todos aquí esta mañana para que escuches nuestro ruego. Pero esta vez Señor, no te pediremos por nuestro Perú. Como hacerlo. Como pedírtelo Señor, si a nuestro Perú tu ya le diste todo. Porque si hubo un lugar en el que tu decidiste poner todo lo que cualquier ser humano soñaría tener para alcanzar la prosperidad para el y su comunidad ese fue el Perú, Señor. Porque aquí, reuniste todas las riquezas, todas las sangres, todos los climas, todas las oportunidades para que un día este pedazo de la tierra sea el más hermoso de los espacios para vivir.

Llenaste sus montañas de oro, plata y minerales. Pusiste inmensos lagos de gas y petróleo bajo sus selvas, y sobre ellos, arboles, vegetación y naturaleza infinita. Dibujaste ríos que cortan la cordillera cargados de energía, bajando a irradiar desiertos que luego se convertirán en verdes valles. Y nos diste un mar de riqueza infinita, con todos los peces posibles y toda la abundancia posible. Hiciste que vinieran todos los hombres y mujeres del mundo a instalarse en nuestra tierra trayendo consigo lo mejor de sus mundos bajo el brazo. Y vinieron gentes de Europa, de Asia y de África. Todos a asimilarse y mimetizarse con las antiguas culturas del Perú, formando un hermoso y envidiable crisol de culturas único en el mundo.

No querido Señor, como podríamos pedirte aun más por esta tierra. Si en ella tú ya lo pusiste todo. Sin embargo, y a pesar de todo lo que nos diste, quienes habitamos en ella NO lo hemos sabido ni podido aprovechar. No hemos podido darle el destino necesario y justo que Tú soñaste al poner todo ello a nuestro alcance. No hemos podido lograr que toda esa abundancia y generosidad con la que nos bendeciste haya podido alegrar la vida de los hombres y mujeres que hoy pueblan nuestra tierra.

Por ello, Señor todo poderoso, estamos aquí para decir y reconocer con humildad que tu no nos has fallado. Que esta tierra no nos ha fallado. Somos nosotros los que hemos fallado. Por eso estamos esta mañana señor, no para pedirte por el Perú sino para pedirte por nosotros. Por todos los que estamos aquí reunidos y por todos aquellos que hoy a diferencia de una gran mayoría de compatriotas si tuvieron la suerte de disfrutarlo todo y de vivirlo todo tal cual tu lo soñaste, para que nos ilumines y nos haga reconocer y revelar de una vez por todas y para siempre cual es nuestro verdadero rol en este Perú que tan generosamente creaste.
Te pedimos que nos hagas comprender que si nos has dado tanto, en un espacio en donde la mayoría tiene tan poco es porque hay un mensaje y una misión expresa tuya detrás. Que es la de asumir nuestro rol como lideres. Como hombres y mujeres elegidos para conducir a nuestro pueblo y nuestro Perú hacia esa prosperidad que tu diseñaste y nos encargaste hacer realidad. Te pedimos Señor, que nos des la fuerza para reconocernos como hombres y mujeres de paso en esta larga historia de la humanidad, cuya misión es entregar nuestras vidas al servicio de las generaciones futuras, y en ese sentido, que sepamos comprender que habiéndolo recibido todo ha llegado el momento de darlo todo.

Que, finalmente, ha llegado la hora que todos demos un paso atrás, renunciando a nuestros sueños mas individuales, nuestras aspiraciones materiales mas personales, y nos demos la mano para formar un solo grito, una sola voz, un solo camino que no es otro que el que tu siempre soñaste y bendeciste para el Perú. El camino de la belleza abrazada a la justicia, de la prosperidad iluminada por la equidad, del amor tocando la puerta a todos los hombres y mujeres que aquí habitan.

Señor, lo sabemos, la tarea no es fácil. Son tantos años en que hemos fallado. Pero nunca es tarde y lo sabes. Aun estamos a tiempo si es que nos decidimos aquí y ahora todos, cada uno en nuestro campo de acción, cambiar nuestro destino común para siempre. Lo sabemos Señor, hemos contaminado tus ríos, hemos vaciado tus montañas, hemos talado tus bosques, hemos despreciado nuestras diferencias. Y ello a nada nos ha conducido. Lo sabemos. Nuestros niños en vez de jugar trabajan sin descanso. Nuestros ancianos mueren olvidados en las puertas de viejos hospitales.

Entonces Señor, si todo eso lo sabemos y estamos todos aquí para reconocerlo abiertamente y sobretodo para aceptar que al habernos dado todo, algo mucho más grande esperas de nosotros. Te pedimos Señor que nos des ese ultimo don que nos lleve a acabar para siempre con esta larga historia y podamos empezar esa nueva historia que siempre quisiste para este paraíso que creaste llamado Perú.

Báñanos, por última vez, de humildad infinita, de generosidad, de solidaridad, de fortaleza de espíritu, de capacidad de perdón, pero también de inteligencia y astucia para enfrentar a todas las fuerzas del mal que se desplegaran en esta lucha que nos convoca. Señor, te pedimos esta mañana por nosotros, los peruanos que tu elegiste para esta ultima gran batalla, prometiéndote darlo todo y entregarlo todo para que un día cuando ya no estemos, quienes aquí habiten, puedan contarle a sus hijos y a sus nietos, que en el Perú se vivieron momentos difíciles, pero que todo eso ya paso.

Que, finalmente, llegó al Perú, ese mundo de belleza y justicia que Dios nos entregó y que sus hijos se encargaron de hacerlo florecer. Te lo pedimos Señor.

(*) Chef, escritor, empresario e importante impulsor de la difusión de la culinaria peruana y "Embajador de Buena Voluntad", nombrado por la Unicef.

El Clima Laboral


Wilfredo Pérez Ruiz (*)

El denominado “clima laboral” es uno de los asuntos que, con primordial énfasis, se aconseja analizar al momento de ver los indicadores de producción, integración, socialización y otros componentes de enorme significado en el quehacer de una corporación. Omitir su trascendencia es un error que refleja una visión limitada de sus alcances en la prosperidad empresarial.

Un elemento que no debe pasar inadvertido, al estudiar la rentabilidad del negocio, es la generación de un óptimo ambiente en donde sus trabajadores se sientan cómodos, respetados y se desenvuelvan altamente motivados. La aplicación de las buenas prácticas de recursos humanos crea favorables condiciones para un mejor rendimiento.

De allí la necesidad de destinar a los colaboradores las mayores atenciones. Se sugiere diseñar un plan para el personal que haga sentir conforme a cada integrante de la compañía. En tal sentido, se forjará un vínculo de lealtad tendiente a reducir la frecuencia de rotación y se incrementarán los estándares de satisfacción en los clientes.

En nuestro medio existen numerosas empresas con un deficiente clima interno y que, además, no se ha detenido a observar su relación con la baja productividad e incluso con la ausencia de fidelidad. La actitud de un empleado –sin distinción de jerarquías y funciones- refleja la “temperatura” del bienestar o malestar organizacional. Las relaciones frías, cortantes y autoritarias –entre otros factores- influyen en la conducta de sus integrantes.

La atmósfera interna está constituida por un conjunto de características que facilitan o impiden el desenvolvimiento y la competitividad. Este se percibe en gestos tan comunes como el vínculo de los jefes con sus subordinados; las celebraciones internas; los estímulos, reconocimientos y premiaciones; las políticas de comunicación corporativa; la forma de recoger y canalizar inquietudes; los procedimientos en momentos de crisis y reducción de personal; etc.

El trato ofrecido influye para afianzar la entrega, identificación y formación personal. Conozco firmas comerciales –incluso de reconocido prestigio- con la equivocada creencia que cumplir con el pago puntual de los honorarios, respetar el ordenamiento legal vigente y dar gratificaciones, es suficiente: Inexacto.

La actuación de quienes conducen la organización es central para forjar positivas condiciones de trabajo. Ellos son los referentes que, por su espacio de influencia, tienen un alto nivel de ascendencia. Sin embargo, todavía se piensa que esta tarea es inherente al área de recursos humanos, olvidando que todos brindan su cooperación para hacer fluida la convivencia y armonía colectiva. Cada uno puede contribuir a fin de concebir más agradable la interacción social.

Muchos individuos pasan ocho, diez o doce horas al día laborando y, por lo tanto, la empresa se convierte en una esfera esencial para ellos. El ser humano requiere saber que existe la oportunidad de trascender. Por esta razón, es conveniente maximizar sus aportes y, en consecuencia, la compensación que espera recibir no solo es económica. Se sugiere fomentar un escenario en donde cada uno “quiera lo que hace”.

Existen entidades en las que el sueldo constituye una asignación que hace sentir conforme y seguro. Es conveniente que la remuneración se determine en concordancia con la jerarquía, responsabilidad, calificación, etc. y evitar establecerla de modo antojadizo y subjetivo.

Debo anotar también las implicancias de las retribuciones emocionales y espirituales. Éstas tienen una connotación que, desde mi parecer, no debiera subestimarse. El empleado necesita percibirse considerado, imaginar que ocupa un lugar en la vida y percibir que su función importa. Las personas demandan tener orgullo, saber que contribuyen en la existencia del negocio. Incentivar un sentimiento genuino de pertenencia facilitará la mutua integración.

Las compañías modernas tienen en su recurso humano una de las ventajas más firmes a fin de enfrentar al mercado y a la competencia. No solo ofrecen un salario justo, sino que, además, brindan incentivos, estímulos y promueven mecanismos para consolidar la identificación con su centro de labores. Esto involucra poner en marcha programas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en donde el colaborador y su entorno familiar son una de las prioridades.

El ser humano reclama que el negocio le ofrezca la oportunidad de crecer. Involucrarlo en las proyecciones futuras, brindar capacitación, transparentar la información, crear canales democráticos de discusión, fomentar la confraternidad, afianzar los valores institucionales y demostrar -en el día a día- que el público interno hace posible la prosperidad de la compañía, son iniciativas destinadas a posibilitar la consolidación de un esperanzador y saludable ámbito organizacional.

(*) Docente, consultor en organización de eventos, protocolo, imagen y etiqueta social. http://wperezruiz.blogspot.com/